15 junio, 2007

Huet Le Mont Sec, Vouvray, 2005

He tenido una nueva ocasión de disfrutar de este magnífico vino, del que ya me quedé prendado en su momento. Nace de las viñas de una edad media de 15 años que el Domaine Huet posee en la finca Le Mont, un terreno de 8 hectáreas de suelo de arcilla y sílice ubicado en la misma ribera del Loira que, en palabras del propio productor, produce los vinos más femeninos y elegantes de la casa. Un blanco para comprar sin dudar a este precio.

Nota de cata:
Bonito color dorado pálido, con destellos verdes. La nariz es cristalina, muy definida, muy mineral (recuerdos de talco y piedra machacada). La fruta aparece en nariz perfectamente nítida: fruta blanca de hueso, piña no excesivamente madura. Otros componentes aromáticos terminan de añadir complejidad al vino, que al olfato se intuye ya fresco y seco: levísimos ahumados, flores blancas y algo que recuerda a chicle de fresa (!). En boca es deliciosamente elegante, con una acidez que parece "expansiva" (cítricos), muy mineral, pleno. Largo posgusto que no parece tener final, fresco y con un cierto recuerdo de té verde. Un vino con todo en su sitio, en el que ninguno de sus componentes necesita "gritar" para ser identificado con nitidez. Es como una maravillosa producción musical en la que cada instrumento es claramente identificable y, a la vez, juntos forman un todo perfecto. Aplauso rotundo.

Composición varietal: 100% Chenin Blanc
Graduación: 13%
Precio: 20 euros
Fecha degustación: Mayo 2007
Consumo: 2007-2015

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